El entorno de trabajo de los proveedores de servicios de atención y aprendizaje durante la primera infancia es activo, ajetreado y programado. Entre el cuidado de los niños, la planificación del plan de estudios y la gestión del aula, podemos olvidarnos de sacar tiempo para relacionarnos con nuestros colegas. Sin embargo, los equipos docentes fuertes que se basan en una comunicación abierta y unas relaciones profesionales respetuosas no sólo benefician a los educadores, sino también a los niños y a las familias.
La importancia de unas relaciones sólidas
Las relaciones son un componente clave de nuestro trabajo. Nuestra primera prioridad es cultivar relaciones sólidas con los niños a nuestro cargo, pero también es importante establecer vínculos con nuestros compañeros. Estas conexiones pueden crear una red de apoyo profesional que mejore nuestro trabajo y nuestro bienestar.
Las relaciones respetuosas y de apoyo entre compañeros se convierten en la base de un entorno de trabajo orientado a la comunidad:
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Crear cohesión. Los niños y sus familias se benefician de la sensación de estabilidad y cohesión que se forma cuando los educadores conectan regularmente entre sí. La comunicación abierta entre los miembros del personal significa que todos están en la misma página, proporcionando información coherente a las familias.
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Favorecer el bienestar y la productividad. Los educadores prosperan cuando se sienten apoyados y seguros en su lugar de trabajo. Los entornos profesionales más acogedores celebran la diversidad de perspectivas y fomentan una comunicación abierta y respetuosa.
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Inspirar la creatividad y la colaboración. Las sólidas relaciones profesionales nos animan a hacer preguntas, proponer ideas y probar nuevos enfoques. Existe la voluntad de colaborar y de inspirarse para probar cosas nuevas basándose en lo que otros educadores hacen en el aula.
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Ofrecer oportunidades para la reflexión. Cuando los miembros del equipo confían los unos en los otros, pueden sentirse cómodos buscando la opinión de los compañeros en situaciones difíciles de la clase. Tanto si se trata del comportamiento difícil de un niño, de una relación difícil con uno de los padres o de un cambio en el horario de la clase, el punto de vista de un colega puede ser muy útil.
Adaptar las conexiones a una agenda apretada
Como las agendas suelen estar muy apretadas, puede resultar difícil encontrar tiempo para relacionarse con los compañeros de trabajo. A continuación se ofrecen algunas ideas para relacionarse con los compañeros que pueden encajar fácilmente en su día a día.
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Queda para tomar un café o comer. Normalmente, hacemos algunas pausas breves a lo largo del día para tomar un tentempié, un café o comer. Esto puede ofrecer oportunidades incorporadas para pedir a un colega que se siente a tomar un café y charlar sobre cómo van las cosas en su aula.
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Crea un tablón de anuncios colaborativo. Si se dispone de un espacio común, un tablón de anuncios puede servir de eje central para que los miembros del equipo se envíen notas rápidas. Los recordatorios de eventos, las actualizaciones de horarios, las noticias positivas y las notas de ánimo son formas estupendas de ayudar a todo el mundo a mantenerse informado.
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Visita diferentes aulas. Siempre que tengas un rato libre, echa un vistazo a otras aulas para ver lo que hacen otros educadores. Puede que encuentres inspiración para una nueva y divertida actividad artística o una nueva forma de colocar el mobiliario de tu aula.