Esta actividad es una forma estupenda de aprovechar los trocitos de lápices de colores rotos que muchos de nosotros tenemos por ahí en clase. Además de los lápices de colores, lo único que necesitarás para esta actividad es plastilina.
Para ello, ofrece a los niños lápices de colores y plastilina de varios colores. Mientras exploran dando forma a la plastilina y decorándola con trozos de lápiz de colores, habla con ellos sobre los distintos colores de la plastilina y de los lápices de colores. Presenta los diferentes colores con sugerencias como «vamos a poner el lápiz de color azul en la masa blanca», o haciendo preguntas como «¿qué colores de lápices de colores hay en la masa roja?».
Exploración de los colores en el aprendizaje cotidiano
El aprendizaje de los colores puede incorporarse fácilmente a la rutina diaria con los niños pequeños hablando con ellos de los distintos colores que observan mientras juegan. El uso de materiales multicolores en el aula, como plastilina, bloques de colores y pinturas, también puede fomentar conversaciones sobre diversos colores.
Para ayudar a los niños a practicar los colores, puedes incorporar los colores a las rutinas diarias haciendo preguntas como: «¿Puedes pasarme los bloques rojos, por favor?» o: «¿Pueden venir en fila todos los que tengan zapatillas de tenis blancas?». Incorporar un lenguaje específico de los colores a lo largo del día dará a los niños muchas oportunidades de practicar el nombre y el reconocimiento de los distintos colores.