Sentirse valorado y querido ayuda a los niños pequeños a desarrollar un sentido positivo de sí mismos. Cuando los niños se sienten queridos por sus profesores, sus padres y sus compañeros, les ayuda a sentirse seguros y cómodos consigo mismos como individuos. Como educadores, una de las partes más importantes de nuestro trabajo es modelar el amor y la bondad hacia los niños de nuestro programa y hacia nosotros mismos.
Compartimos algunas de nuestras ideas favoritas y sencillas para practicar el amor en su programa de aprendizaje temprano.
Apreciar a los niños por lo que son. Una de las formas más sencillas de hablar de amor con los niños es hacerles saber que se les quiere por lo que son, llamando la atención sobre lo que les hace especiales o únicos: «Me encanta lo mucho que me haces reír». «Me encanta lo amable que eres con tus amigos». «Me encanta lo mucho que has trabajado hoy en tu proyecto». Si un niño se ausentó de la escuela el día anterior, hágale saber lo mucho que le ha echado de menos a su regreso. Estos pequeños recordatorios ayudan a los niños a sentir que pertenecen y son valorados.
Habla del amor en la hora del círculo. La hora del círculo es una parte valiosa del día para las discusiones en grupo y las oportunidades de aprendizaje. Durante la hora del círculo, intenta hablar con los niños sobre cómo es el amor preguntándoles «¿Quién te quiere?». «¿A quién quieres tú?» «¿Qué sientes cuando sabes que alguien te quiere?» «¿Cómo podemos demostrar a alguien que le queremos?» «¿Qué es lo que amas de ti mismo?»
Modela el amor propio. Puede que los niños pequeños no entiendan lo que es quererse a sí mismos, pero pueden aprenderlo de ti. Habla con los niños sobre lo que se siente al quererse a uno mismo y enséñales a practicar la autocompasión. Habla a los niños del valor de sentirse orgulloso de uno mismo cuando se ha conseguido algo, y de la importancia de ser amable con uno mismo cuando se tiene un día difícil.
Practica una meditación de bondad amorosa, enviando «pensamientos amorosos». Si trabajas con niños de preescolar, puedes probar con una meditación breve y tranquila para dar a los niños la oportunidad de pensar intencionadamente en alguien a quien quieren. Blissful Kids recomienda esta meditación rápida que se puede hacer con los niños pequeños para practicar el amor, la positividad y la conexión:
Haz que los niños se sienten en una posición cómoda y hazles saber que vas a realizar una actividad tranquila. Quizá quieras atenuar las luces o poner música tranquila de fondo para crear un ambiente de calma en la habitación.
Pide a los niños que elijan a alguien en su vida que quieran, alguien que les haga sonreír. Puedes empezar hablando un poco de cada persona.
Una vez que los niños hayan elegido una persona, pídeles que cierren los ojos y piensen en ella. Pídeles que se lleven las manos al corazón y que imaginen que están dando a esa persona un abrazo cálido y apretado. Puedes hablar con los niños diciendo: «Cuando cerréis los ojos, quiero que os imaginéis la cara de la persona. Piensa en lo feliz que se siente cuando la tienes cerca de tu corazón y la abrazas. Imagina la sonrisa en su cara».
Después de unos momentos de silencio, pregunta a los niños qué sintieron al enviar pensamientos amables a esa persona.
