Como todo el mundo se ha visto afectado por la pandemia de COVID-19, es un momento de ansiedad para adultos y niños. Aunque podamos pensar que somos capaces de proteger a los niños de las noticias y la información sobre el COVID-19, los niños suelen captar mucho más de lo que creemos. Son conscientes de que sus rutinas han cambiado y probablemente han notado que sus padres o cuidadores están bajo mucho estrés en este momento. Por eso es tan importante mantener conversaciones sinceras y reconfortantes con los niños pequeños sobre esta pandemia.
Conversaciones sinceras y reconfortantes
Las conversaciones deben ser apropiadas para el desarrollo de los niños, para evitar abrumarlos con información innecesaria o aterradora. Sin embargo, deben dar a los niños una comprensión básica de lo que está sucediendo y por qué las cosas son repentinamente tan diferentes. Mientras hablas con los niños de lo que es diferente, recuérdales lo que sigue igual: «No vamos a la escuela, pero seguimos leyendo cuentos juntos todas las noches antes de acostarnos». Asegúrese de que los niños sepan que están seguros.
Responder a las preguntas
Utilice las preguntas de los niños para comprender lo que saben y lo que quieren saber. Aprovecha sus preguntas como momentos de enseñanza y oportunidades de aprendizaje para darles pequeños fragmentos de información cuando sientan curiosidad y estén dispuestos a aprender. Al responder a las preguntas, Cero a Tres recuerda que es importante que las respuestas sean sencillas y adecuadas a la edad.
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¿Por qué no puedo ir a la escuela? Cuando los niños están fuera de sus rutinas típicas, es probable que quieran entender por qué. Cero a Tres comparte la siguiente respuesta como ejemplo, «Tu guardería está cerrada ahora mismo. Tu profesor y tus amigos también están en casa, igual que tú. Cuando la guardería vuelva a abrir, podrás volver a ver a tus amigos. Ya te diré cuándo». Al hablar con los niños sobre los motivos por los que no pueden ir a la escuela, es importante evitar entrar en detalles sobre la enfermedad para que los pequeños no desarrollen temores sobre la asistencia a la guardería cuando las escuelas vuelvan a estar abiertas.
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¿Por qué esa persona lleva una máscara? Si los niños han salido a la calle, es probable que hayan observado que la gente en las tiendas o en el vecindario lleva guantes, máscaras u otros equipos de protección. Esto puede asustar a los niños, ya que es algo que no están acostumbrados a ver, por lo que una respuesta sencilla, como «A veces la gente lleva máscaras cuando está enferma. Cuando están mejor, dejan de llevar la máscara». Intenta responder con sinceridad, sin dar demasiada información innecesaria que pueda asustar. Para más información sobre esta cuestión, consulte este artículo de Zero to Three.
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¿Cuándo terminará esto? ¿Cuándo volveremos a la escuela? Aunque no conozcamos todas las respuestas, es importante tranquilizar a los niños diciéndoles que esto terminará. Podrías decir algo como «cuando te sientas mejor, volverás a la escuela y verás a tus profesores y amigos de nuevo».
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