Como profesionales de aprendizaje temprano arreglamos nuestros salones de clase considerando intenciones bien pensadas, esperando inspirar la curiosidad, el interés y el involucramiento de nuestros niños. Sumado a la selección y el arreglo de los materiales en los ambientes para el aprendizaje, también consideramos cómo debemos ofrecerlos a los pequeños. Los programas Reggio Emilia ofrecen los materiales a través de “invitaciones para jugar”, viendo ésto como una oportunidad para apoyar a los niños con diferentes maneras divertidas de exploración e investigación.
¿De qué se trata las invitaciones para jugar?
En los términos más simples, una invitación para jugar es un enfoque específico de cómo arreglar los materiales en el salón de clases, de manera de que los niños se sientan inspirados para explorar, crear y jugar.
De acuerdo con Anna Ranson, quien es una educadora de aprendizaje temprano y autora del blog enfocado en ECE, Imagination Tree, El árbol de la imaginación, una invitación a jugar puede ser tan sencillo como “arreglar una mesa para tomar el té y jugar a comidas con una mesa pequeña y algunas servilletas…o presentar a los niños algún objeto raro para que investiguen. La mayoría de las veces sólo al colocar los juguetes o materiales en lugares diferentes o en sus formas originales provocan la imaginación de los niños y pueden ver las cosas con otros ojos y producir ideas nuevas.”
¿Cómo es que las invitaciones para jugar apoyan el desarrollo?
Una invitación para jugar alienta a que los niños inicien sus propios juegos, lo que a su vez respalda el sentido de identidad y el deseo de ejercitar independencia. Cuando la invitación a jugar incluye materiales sin objetivos específicos alienta a los niños a ser creativos, a explorar y a interesarse en cosas nuevas.
¿Cómo se ve una invitación para jugar?
Las invitaciones para jugar pueden arreglarse casi en cualquier lugar y pueden incluir una amplia variedad de materiales. Pese a estas variaciones, todas comparten las siguientes características.
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Los objetos deben arreglarse todos juntos en un espacio específico. En una invitación para jugar los materiales se colocan todos juntos en una bandeja, una cobija o en un recipiente. Esto estimula la creatividad mientras los niños trabajan juntos cuando exploran diferentes maneras de usar los materiales tubo.
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Hay poca instrucción de los adultos. Cuando se configura la invitación para jugar se está alentando a los niños para que exploren por sí mismos. Los adultos ofrecen ese estímulo, pero permiten a los pequeños tomar el liderazgo e iniciar sus propios juegos con los materiales.
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Las actividades organizadas con el mejor interés de los niños en mente. Cuando estructuramos las invitaciones para jugar es importante que consideremos los tipos de juegos que son interesantes para los niños. Por ejemplo, cuando trabajamos con niños muy pequeños hay que considerar experiencias sensoriales, por lo que podemos organizar la actividad con materiales que incluyan plastilina y arena kinética.
