Las pausas para comer pueden ser un buen momento para dar un paseo y tomar aire fresco.
Tanto si paseas solo como acompañado, el paseo puede rejuvenecerte física y mentalmente.
Incorporar la meditación durante todo el paseo, o incluso sólo durante los primeros minutos, te permite hacer una revisión personal antes de afrontar el resto del día.
Just Sit , de Sukey y Elizabeth Novogratz, incluye recomendaciones para una meditación caminando productiva:
«Programa un temporizador en tu teléfono durante tantos minutos como quieras… En esta meditación, deja que tu ancla sean tus pies. Siente la sensación de tus pies tocando el suelo. Cuando tu mente se desvíe, vuelve a la sensación de tus pies tocando el suelo. Cuando llegues al final de tu camino, date la vuelta y hazlo de nuevo».