No hay nada más veraniego que una jugosa sandía, y este experimento científico utiliza la sandía para crear una emocionante reacción química. Sólo necesitarás bicarbonato sódico, vinagre, jabón de cocina, colorante alimentario y la sandía (quizá también quieras una bandeja o un cubo para recoger la efervescencia). Para preparar la sandía, haz un pequeño agujero en la parte superior, lo bastante grande para sacar la fruta del interior.
Los pequeños disfrutarán ayudando en este paso, ¡y la fruta puede guardarse para un sabroso tentempié más tarde! Una vez limpia la fruta, añade ½ taza de bicarbonato sódico, un par de chorritos de jabón de cocina y unas gotas de colorante alimentario.
Cuando estés listo para iniciar la erupción, vierte vinagre directamente en la sandía y ¡mira cómo fluye! Mientras hace erupción, habla con los niños sobre la reacción química que se produce cuando se combinan el bicarbonato y el vinagre. (Puedes explicarles que la mezcla de una base, que es el bicarbonato, y un ácido, que es el vinagre, produce dióxido de carbono). ¡Esta actividad está llena de aprendizaje sobre química y matemáticas!
Para añadir arte a esta actividad, invita a los niños a decorar la sandía antes de la erupción, con pintura, pegatinas, cinta adhesiva y otros elementos divertidos ¡para hacer un volcán de colores! O bien, mezcla dos colorantes alimentarios para crear un nuevo color para la erupción.